Weddings


Este fin de semana hemos estado en la boda de una amiga y el evento nos ha ayudado a reflexionar sobre la moda, las tendencias y estas ocasiones en las que se lucen, o no, las mejores galas.

Son precisamente en estas citas cuando podemos observar cuáles son las tendencias que más se siguen, las más imitadas, cuáles son los accesorios más llamativos, los más originales o qué personas portan un outfit espectacular.

Nosotros estuvimos atentos y tomamos buena nota de todo.

Entre el sector femenino pudimos ver vestidos con drapeados y pliegues en tonos nude, palabras de honor, aunque poca asimetría en los escotes y predominio de colores lisos frente a los estampados.

Nos llamó la atención una asistente, con vestido de plumeti negro y que además adornaba su cabeza con un maravilloso tocado con forma de pill box en terciopelo negro y del que caían unas plumas. Precioso y diferente, sobre todo porque tenía historia, era un auténtico vintage.

Nos dimos cuenta de que muchas invitadas llevaban aplicaciones de pedrería en los tirantes o en los escotes pero nos gustó especialmente un adorno que estaba situado en el hombro y que combinaba tul y cristales que simulaban una pieza de alta joyería.

Hombres y mujeres adoptan e interpretan de forma diferente las tendencias y la moda. Algunos concediendo escasa importancia a la apariencia estética, otros demasiada.

De entre el sector masculino los tonos oscuros y las camisas lisas suelen marcar la tónica general. Sin embargo, cada vez hay más hombres que se atreven con detalles más lanzados. Calcetines de colores, tirantes, cuellos de las camisas más abiertos, corbatas estrechas, de punto, zapatos de hebilla y hasta looks de décadas pasadas.

Nos encanta observar cómo la gente elige sus estilismos y cómo los realzan, pero lo que más nos gusta es ver cómo se comportan, cómo se mueven, percibir cómo se sienten y es que la ropa y la moda son algo más que llevar marcas o una tela alrededor del cuerpo. Nos vestimos reflejando quiénes somos y cómo nos sentimos.

Pero hay algo que no se compra, que no lo aporta únicamente la ropa que llevas, que es inherente a la persona y que es capaz de eclipsar al mejor de todos los looks. Hablamos del estilo personal, de la elegancia innata que poseen determinadas personas para mover su cuerpo, caminar erguidos, sentarse y levantarse con delicadeza y transformar un simple trozo de tela en algo absolutamente evocador y deseado. Todo ello sin perder la naturalidad.

Es lo que siempre perdura, lo que deja huella.

Pese a todo, lo importante es disfrutar de la gente y divertirse. Nosotros lo hicimos!!!


Que tengáis un buen lunes.


THE FASHION GALLERY ROOM