Good morning readers!
Os vamos a enseñar un objeto único, de un material casi imposible de encontrar hoy en día y con un precio de vértigo.
Cuánta gente creéis, estaría dispuesta a gastar 4.200 euros en unas gafas de sol? Seguramente nos tacharéis de locos por tan solo plantearos la pregunta, pero dejad volar la imaginación.
Esa es la nada despreciable cantidad que tendrá que pagar la persona que se encapriche de este par de gafas que os mostramos a continuación.
Realizadas en auténtica concha de tortuga, de estilo clásico-deportivo y con lentes fotocromáticas de la Maison Bonnet . Creadas por especialistas para Thomas Erber y su Cabinet of Curiosities o Gabinete de Curiosidades, de ahí que se hayan bautizado con su nombre.
Como ves, el verdadero lujo no entiende de excesos ni de logos, es discreto y pasa inadvertido para que los que no saben identificarlo no noten su presencia.
Aunque lo contamos como una simple curiosidad, no nos resistimos a imaginar que nos las probamos para comprobar qué se siente cuando se lleva unas gafas de sol de semejante calibre.
Por si alguien se anima, están a la venta en la e-shop de Colette .
Este post nos hace pensar en George, de Denis, al que mandamos un saludo.
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